La vez anterior escribí sobre mi búsqueda a  lo espiritual, iba en bueno camino. Ahora, debo confesarles que vivo días que de espirituales no tienen  ¡nada! Me da un poco de pudor admitirlo porque ya saben que soy muy tímida, pero no se porque extraña razón al escribir me vuelvo bien descarada.
Fue un viernes, primera semana de Agosto, casi eran las 5 de la tarde, mi jefe me reventaba el celular diciéndome que debía asistir a un evento de las mas importantes constructoras del país, era necesario, obligatorio que vaya. Yo, había quedado con mi amiga Mily para ir a tomarnos un trago, en una disco de la Calle Berlín…antes debía pasar por la clínica a uno de mis cotidianos chequeos cuando recibí su llamada, me pareció  raro que sea M, a quien trate algunas veces por temas legales, es abogada, siempre muy amable, cariñosa y  amistosa conmigo algo fuera de lo común en mi centro de labores donde a la mayoría les caigo antipática y mas cuando no pueden ganarme y de manera no tan sutil me burlo de ellos.
Pensaba que era parte de su personalidad, hay gente que vive alegre, contenta, riéndose siempre como si el planeta viviera su mejor momento así la percibía a ella: una chica de personalidad muy fuerte, agradable, que a todo el mundo le cae bien, diplomática, muy distinta a mi.
-¡Alò! ¿M?
- Si, si..Hola ¿Cómo estas?
- Súper bien! (era mentira me acababan de decir que mi hemoglobina a pesar de tratamiento no subía)
- ¿Tienes algo que hacer? Sabes dese hace tiempo quería invitarte a tomar un café, necesito alguien con quien conversar, no se porque confió tanto en ti a pesar que no hablamos mucho…
- mmm claro, claro. Mira yo, voy a salir mas tarde pero si se trata de un café. Te espero a las 7 en…
Llegamos al “Café café” de Miraflores, cuando nos dieron la carta recordé que el medico me ha prohibido el licor, pensé: ¡Que puta, que me entierren con un pisco Biondi y Viva el Perù!. Ella también se pidió lo mismo, asi nos llegamos a tomar como 4 rondas de tragos. Era necesario para romper el hielo, ya no hablábamos de nada que tenga que ver con el trabajo, solo de nosotras, poco a poco sentía que me miraba diferente, quería saber si eran solo cosas que pasaban por mi mente, pero no podía provocar nada solo ver sus reacciones a algunos temas que planteaba. Ella me tomo de las manos, se acerco muchísimo a mí y en un momento comenzó acariciarme una de mis rodillas. Le dije que deberíamos irnos porque estaba muy mareada y no iba a poder manejar en ese estado. La acompañe hasta el estacionamiento me pidió que entrara un ratito a su auto que temía quedarse dormida. Una vez dentro M, se lanzo hacia mí, empezó a besarme, acariciarme…encantada correspondí a todo, estábamos muy excitadas tanto no nos dio tiempo de llegar a un hotel, creo que nos calentaba mas saber que nos podían ver, que no era un lugar privado, el celular seguía timbrando , me llamaba una chiquilla con la que  flirtear por esos dias. En fin así se dieron las cosas.
Read More Al día siguiente, no pensé en llamarla creí que ella tampoco lo haría, sin embargo me llamo, hablamos el sábado, el domingo, el  lunes me invito a desayunar, almorzar, y a las dos cosas le dije que no. Me preocupaba el trabajo, no pude seguir negándome la verdad quería repetir esa noche, salimos nuevamente, sin licor de por medio hicimos nuevamente el amor y definitivamente recordé porque mi amiga Mily dice que sus “favoritas son las arequipeñas” jajaja.
M, resulto ser un volcán, es tan apasionada, tiene tanta energía, un apetito sexual incontenible. Con  hidalguía, quiero comentarles que me sentía cansada, agotada, exhausta, después de casi cuatro horas de este tipo de sesiones, pero ella parecía que recién comenzaba, nos dieron las 7 de la mañana y quería quedarse más tiempo. Sentía que no iba a su ritmo, le pregunte porque no se cansa nunca me dijo: que conmigo nunca se cansaría, que yo la motivaba. Por la mente solo se me paso  - ¡Pucha!  yo, si estoy cansadísima, no doy mas..
Hasta hoy sigue nuestra relación, hemos convertido a un hotel de Miraflores en el escenario para nuestros interminables encuentros, ella me vuelve loca, jamás estuve con nadie que amara con tanta pasión e intensidad, me encanta que este dispuesta a hacer cosas nuevas, a inventar cada día, una nueva forma de amar, hay días en los que he sentido que dejo el alma, que me gana el cansancio, que no puedo mas, pero al escuchar su voz, sus jadeos, su risa y todo lo que me dice, me lleno nuevamente de energía. Sigo preguntándome de donde saca tanta fuerza. Disfruto también, cuando vamos al cine y estamos de la mano en toda la función, cuando almorzamos, desayunamos y cenamos juntas, la extraño cuando regreso a casa.
Creo que la amo, estoy enamorada de ella, se que las metas de realización personal que tiene pueden separarnos y trato de no amarla mas, pero me es imposible. Seguro se ira de mi lado en algún momento, le ruego a Dios que no sea pronto, seguro piensan que soy paranoica y no debo pensar en eso, ya me desplace hacia ese momento y se que escuchare esa canción de la película que fuimos a ver hace dos meses… mientras tanto ya se que no la olvidare, que estará siempre conmigo y que la recordare como aquella persona que me hizo creer de nuevo en el amor, mi buen amor, mi amiga cariñosa, mi confidente, mi motivo de felicidad, la que siempre me hace reír, mi gran amor, mi amante insaciable…

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